Agrandad la foto y veréis muy pequeñito el parapente de Oriol sobrevolando el Glaciar. Impresionante.
Por Oriol Fernández.
Por fin hemos tenido una tregua en el mal tiempo y durante un par de días el cielo ha estado completamente azul, sin una nube. El día 17 Matt, Patrick, Brad y yo, nos planteamos intentar dar la vuelta al macizo del Rakaposhi. El día es muy estable y tardamos en despegar, después de pasarnos un buen rato equipándonos. Hacemos prácticamente el recorrido juntos, primero por el norte del valle y saltando a la cara oeste del Rakaposhi cuando el valle gira al sur. LLegamos prácticamente a la vertical de Gilgit, a una pared de una roca gris con una arista de nieve espectacular donde nos quedamos para hacer fotos y filmar. En este punto podemos contemplar al sur la imponente silueta del Nanga Parbat sobresaliendo entre las demás montañas. Decidimos darnos la vuelta ya que el techo no es muy alto para intentar rodear el Rakaposhi y volvemos pegados a su espectacular cara norte, llena de espectaculares seracs a punto de caer y de impresionantes glaciares. Un fantástico vuelo en muy buena compañía. Por la noche lo celebramos en el hotel con alguna cerveza.
El 18 junto con Brad y un piloto japonés queremos intentar la ida y vuelta a Passu, dependiendo de las condiciones y de nuestro estado después de las cinco horas de vuelo del día anterior. El día parece bueno así que nos equipamos en el despegue con toda nuestra ropa disponible. Brad y yo además con nuestros equipos de O2. Al despegar nos dirigimos al este, al punto marcado para decidir si saltamos al norte o no. Cuando llegamos, a pesar de que las condiciones no son muy buenas, decidimos ir hacia el norte para poder contemplar el espectacular paisaje que se nos abre llegando a Passu. Passu es un pueblo en la Karakorum Highway (KKHW) donde terminan tres impresionantes glaciares, Ghulkin Glacier, White Passu Glacier y Black Batura Glacier. Este último es el cuarto más largo del Karakorum con 56km de recorrido. Y al norte podemos contemplar la impresionante pared del Tupopdan conocida como la Catedral. Entre el Passu y el Batura Glacier giro una térmica hasta 5200m que me permiten contemplar este majestuoso espectáculo. El fuerte viento de sur nos impide intentar el regreso y decidimos aterrizar. Escogemos una playa del rio junto a la KKHW, donde decenas de chinos que estaban trabajando nos reciben con aplausos.
A lo largo de la KKHW se pueden contemplar numerosos campamentos de chinos y pakistanís que trabajan en la ardua labor de remodelar esta increíble carretera que recorre una de las más espectaculares cordilleras del mundo. Es increíble como luchan constantemente para mantenerla abierta debido a los habituales corrimientos de tierra que se producen. Nosotros, durante nuestro regreso a Karimabad debimos detenernos dos veces y esperar a que alguna máquina de las que trabaja en la remodelación viniera a abrir paso.
Dos espectaculares días de vuelo, que han venido seguidos de otros dos días de viento y lluvia.
Espectacular vista del Nanga Parbat fotografiado por Oriol en vuelo.
2 comentarios:
hola Oriol, si sigues haciendo techos superiores a los 5.000durante 2-3 horas unos tres días por semana, conseguirás una aclimatación muy correcta que te puede permitir usar el O2 un poco más tarde, o sea un poco más arriba, ya que tendrás valores del pulsioxímetro superiores a los esperados, felicidades. Con los vuelos por encima del Karakorum que podemos ver en las fotos colgadas en la web, ya tienes para explicar a los nietos. Mientras, nosotros babeamos de envidia y admiración. Un abrazo, Toni Veres.
muy buenas...
... las fotos bestiales... increibles... para "babear" realmente...
ahora solo necesitaras andar un poquito... no?
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